miércoles, 7 de enero de 2015

Silencio.

¿Para qué mostrar debilidad si puedo llorar en silencio?
Siempre he pensado que los que lloran en silencio son los valientes porque no muestran debilidad a los demás, pero mientras más lloro, más débil me siento. ¿Acaso los valientes no son los que muestran las lágrimas a la luz del mundo?

Justo cuando empiezas a creer que todo va bien, que el reino prospera, sucede algo que te hunde. Te hunde cual ancla que se clava en el fondo marino para sujetar un navío. Creo que yo sola podría sujetar las tres carabelas de Colón. ¿Es posible que tenga yo cuarenta marineros para que vengan a sacarme?  


Basta de preguntas retóricas, los valientes también tienen debilidad y al final lo débiles somos los que menos la mostramos. 

Ay, cuán dura es la vida de un rey o reina. Mostrar firmeza y valentía ante todo y dejar las lágrimas y la debilidad para dentro de la alcoba. Si supiéramos como afrontar las adversidades sin el menor dolor posible, la vida sería más maravillosa, pero como la vida no es maravillosa en muchos momentos hay que remontar todas las caídas. 

Nunca daros por vencido reinas y reyes,

Yo, la Reina. 

domingo, 4 de enero de 2015

Sean bienvenidos a Palacio.

Posiblemente pensaréis que este es un blog en el que os hablaré de Historia: reinados, Imperios... PUES SÍ. Sin embargo habrá una peculiaridad, nosotros escribiremos la historia. Nuestros amores, nuestros desamores por el contrario, nuestras tristezas, penas, lamentos, y por supuesto nuestras alegrías, emociones y sentimientos. Cualquiera podrá ser aquí el rey o la reina. Por supuesto, yo os escribiré historias mías, momentos de bajón o de subidón. Sacaré tiempo de mi apretada agenda para poder haceros ver que la historia es preciosa, sólo hay que entenderla.

Mandadme vuestra historia a la dirección de correo: eraseunavezunareina@gmail.com

Mientras tanto, reíd, llorad y haced lo que os venga en gana porque esta es vuestra vida y sólo vosotros vais a vivirla.

Yo, la Reina.